Bueno, sé que odiáis esperar, pero las clases de lengua solo dan para esto *-*
Pues eso pequeños que hoy tengo el siguiente capítulo, espero que os guste y me dejéis un comentario, que me hace mucha ilu.
Nada más que decir amoreir. ¡BESOS!
Catherin siguió su rutina, sin ningún cambio. Una mañana de ese mismo mes, cuando ya había olvidado lo pasado ese día, llego a la peluquería, como hacía cada poco tiempo.
- Buenos días Catherin - la saludó la propietaria, siempre la trataba bien porque dejaba mucho dinero en aquella peluquería.
- Buenos días señora, quiero lo de siempre. El pelo rosa.
Allí se quedo una hora, luego salió y en la puerta se encontró con el chico de los ojos de estrella. Le miro y se quedó pasmada de encontrarlo allí.
- Hola Catherin - saludó como si fuera un viejo amigo.
La chica se paró delante de él y susurró su nombre.
- Veo que me has echado de menos - añadió él con una brillante sonrisa que pegaba perfectamente con sus ojos.
Catherin se quedo callada. Se giro para irse pero se encontró de frente con el hombre que le había pagado el tinte.
- Buenos días señorita - la saludó mientras la boca de la muchacha formaba una perfecta "o" -. Tú debes Catherin, la hica de la que mi hijo no para de hablar.
Cuando terminó de hablar, Catherin miro hacia los lados esperando ver algún niño, pero en aquella calle solo estaban el señor, Jack y ella. ¡Jack! Catherin le miro sorprendida:
- ¿Es tu padre? - preguntó como si aquel hombre no estuviera delante.
- Sí, soy Jack Varvënski, hijo de Thomas Varvënski.
- Ya... ¡claro! - dijo la chica como si ya lo entendiera todo -. ¿Podemos hablar un segundo a solas Jack? - añadió mirando a Thomas, este se fue diciéndole a su hijo que estaría en el bar - ¿Le robe a tu padre? - preguntó la chica aunque sabía que era evidente la respuesta.
- Exacto - dijo Jack -. No le dije nada, tranquila - añadió guiñando un ojo -, le sobra el dinero.
Estuvieron hablando largo y tendido un rato más y, finalmente, quedaron esa noche en la puerta del bar.
- Yo llevo el dinero, que tengo más fácil quitárselo a mi padre - dijo riendo.
Jack volvió a su casa, sin pasar por el bar a avisar a su padre, pues ya estaría muy borracho, pensó el chico con amargura. Entro en la enorme casa de paredes blancas y muebles negros, fría como el hielo.
- ¡Ya estoy en casa! - grito sabiendo que ella nunca le oiría, seguro que estaba en la casa de su amante, su estúpido amante.
Entro en la cocina y comió algo. Luego subió a su habitación y se pasó toda la tarde pensando en la ladrona del pelo rosa.
Llego medianoche y Catherin ya estaba a la puerta del bar. Espero media hora, una hora, hora y media. Ya siendo la una y media el chico de ojos de estrella apareció en la esquina.
Va, nada más. Cuando pueda subiré el siguiente. Otro besuu *-*
Genial Moon Light!! Me da pena que lo haya visto con un día de retraso :( así que voy a afliarte enseguida para que no vuelva a pasar ^^
ResponderEliminarPor cierto, se entiende bien el cambio de perpespetiva de un personaje a otro, pero ¿podrías poner un espacio más de separación o algo para que quede más claro? sólo es una sugerencia claro :)
Muchos besos
Muchas gracias :3
EliminarCuando tenga tiempo también yo te afiliaré *-*
Va, gracias por la sugerencia, creo que tienes razón, la próxima vez lo haré :3
Muchísimos besos :3